martes, 29 de abril de 2008

Blogers y su papel en una nueva mercadotecnia

Navegando por bitacoras.com antes de empezar mis labores me tope con una nota de la autoría de Raúl Ordóñez sobre entradas patrocinadas en los blogs. Al parecer el tema está en algo candente ya que hay infinidad de opiniones encontradas y unas tan válidas como las otras.
Les he de confezar que no me encuentro muy sumergida en el tema (razón por la cual los invito a sugerirme material de lectura) pero a lo que un simple mortal como yo, un cuanto tanto ajena al tema les comparto: el blog ha venido a revolucionar mucho la identidad de las personas en el cyberespacio, se recordarán de los famosos "chat rooms" donde ponías cualquier nombre y chateabas con otra bola de desconocidos. La frialdad de la pantalla permitía el anonimato total y basicamente daba pie a más de una actuación digna de un Oscar; sin embargo el blog ha venido a poner pensamientos reales, ídeas concretas y una voz a los usuarios del cyberespacio: les ha venido a dotar de una identidad. El blog te da la libertad de escribir lo que quieras, de lo que quieras, cuando quieras y te da la oportunidad de compartirlo a la comunidad cibernética; el cyberespacio no es más un lugar de anonimato.

Ahora bien, en cuanto a las entradas pagadas y las entradas patrocinadas honestamente les digo no le veo nada de malo siempre y cuando se cumplan ciertas condiciones (ay estos abogados nunca están contentos). Desde el punto de vista de las entradas pagadas seamos realistas, supongamonos que una X empresa de cosméticos tiene un blog y le paga a Madonna por escribir en el blog y porque la entrada aparezca en el mismo; a mi mortal ojo eso no tiene nada de malo y es una gran forma de incrementar el flujo del tráfico a quizas un naciente blog y además de atraer poenciales clientes o bien clientes finales de la marca X en cuestión.

Ahora cambiemos un poco la fórmula anterior; cuando a un blogger le pagan por escribir una nota sobre X servicio digamos. Bajo un buen esquema y un buen contrato de patrocinio creo que pudiera ser algo bastante benéfico para el blogger y para la compañía. La nota que les cito al principio decía en alguna parte que lo que podría acarrear una fórmula así era que el blogger vendiera su alma al mejor postor; seamos realistas el blogger quizas lo haga no les digo que no sin embargo no lo puede hacer a ciegas ya que, insisto, un esquema ordenado de patrocinio podría ser la solución y en dicho esquema se DEBEN de incluir entre otras muchas cosas la prueba del producto a promocionar. Asumamos que a mí me ofrece una aerolínea Z el pago por una nota en mi blog de determinadas palabras en x fecha etc etc (si se quieren meter a las particularidades del contrato consultenme), forzosamente tiene que estipularse la inclusión de quizas dos vuelos en la aerolínea en cuestión osease la prueba efectiva del producto a promocionar.

No hay que ser un mercadólogo increiblemente sabiondo para saber que un producto que no se conoco no se puede promocionar y, por el contrario, una compañía que no ofrezca un esquema donde el bloger pruebe el producto está comprando un riesgo sumamente caro. La ventaja de la promoción vía blogers es clara: el bloger es un simple mortal que le llega a la gente por la simple empatía que produce a través de sus entradas y así como simple mortal da una recomendación sencilla y clara sin rebuscamientos inecesarios llegandole a un número importante de personas sin tener un gasto extraorbitante en campañas de publicidad.

En la industría farmacéutica incontables veces se les paga a famosos Dr's para que hablen o escriban artículos sobre un determinado producto y lo promocionen en revistas del medio. Considero que el esquema que se propone es similar.

Todos tienen un precio dicen por ahí y garantías infalibles de que el bloger no venderá su conciencia no las hay pero en esto también tiene mucho que ver la integridad del bloger y su grupo de valores que pregone por la red y en su blog.

Honestamente pienso que es un esquema que las compañías pueden aprovechar con buenos resultados y que definitivamente requiere de un contrato por demás efectivo para la protección empresarial y del bloger recordando que los ángeles o demonios internos se regulan por la conciencia y no por un pedazo de papel.